Es increíble lo mucho que tiendo a complicarme la vida.
Justo cuando ha acabado toda la tempestad después de 2 años lloviendo a mares, cuando se supone que todo va genial, que puedo disfrutar la vida...
A mi mente le da por declararme la guerra.
Siempre he sido perfeccionista hasta la medula (solo conmigo misma), cosa que, según crecía se veía reforzado por una madre perfecta.
Pero me di cuenta de que la perfección no existe!! Y descanse...
Ahora solo quiero relajarme, dejarme llevar y curiosear... Pero sobre todo no quiero juzgar a nadie, ni siquiera a mi misma...
Estoy conociendo a gente increible a traves del Blog y me siento muy afortunada por ello. Muchas gracias a tod@s!!
1 comentario:
Yo también era muy exigente conmigo misma, por suerte hace años que cambié el chip :)
Muchos besos
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